Los compañeros de trabajo no son tu familia

Algunos errores que cometemos cuando empezamos en el lmundo laboral

 

Los  compañeros de trabajo no son tu familia.

 

Tras acabar la carrera y estando en mi primer trabajo, mi jefe me recomendó a unos conocidos y pasé en seis meses de ser auxiliar de laboratorio a tener que montar, acreditar y dirigir un laboratorio de geotecnia y mecánica de suelos.

Trabajábamos de 50 a 70 horas a la semana, comíamos juntos, íbamos y volvíamos en grupo en el mismo coche…éramos una pequeña familia. Montamos el laboratorio, detecté fallos en la maquinaria y evité un desastre, nos acreditamos con felicitación incluída del técnico de la administración, la vida era feliz. Los jefes eran muy cercanos, y en las comidas hablábamos de lo divino y lo humano. A veces las discusiones se animaban y terminaba discutiendo sobre política, temas de gestión o cualquier tema con mis jefes.

ERRORRRRRRRRR!

Tus jefes no son tu familia. No son tus amigos. Son tus jefes. Asúmelo. Punto.

Ofrecer o aceptar una excesiva confianza personal siempre jugará en tu contra, porque, bienvenido al mundo real, la gente te juzgará por lo que menos les guste de ti. Así que asegúrate de que se te conoce por tu trabajo, no por tus opiniones.

PD: tras unas cuantas discusiones sobre política, filosofía, gestión, y saber que estaba montando un negocio de informática en otra ciudad, mi cese fue, digámoslo suavemente, fulminante.

 

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